Estos ejercicios se utilizan para estirar y fortalecer los músculos pélvicos, lo que beneficiará a la mujer en el momento del parto y además puede prevenir o reducir la pérdida accidental de orina.
Tienen gran importancia durante el embarazo ya que ayuda a reducir la incontinencia agravada por el peso del bebé y evita que tras dar a luz se produzca el prolapso del útero y vejiga.
TÉCNICAS PARA REALIZAR EL EJERCICIO
La mujer debe apretar los músculos de la vagina y del suelo de la pelvis, debe de sentir que estos músculos se vuelven hacia dentro.
Otras técnicas son:
- Interrumpir el flujo de orina.
- La contracción de la vagina alrededor del pene durante el coito.
Se deben evitar los movimientos de empuje durante la realización del ejercicio, para esto debe conocer como se siente el empuje. La mejor manera para conocerlo es manteniendo la respiración y empujando hacia abajo con los músculos abdominales como si estuviera intentado defecar.
Las contracciones de los músculos vaginales y pélvicos deben mantenerse durante al menos 10 segundos, y descansar otros 10 entre contracción y contracción para que puedan relajarse.
Estos ejercicios pueden iniciarse con tan solo 2 segundos por contracción (se aumentará progresivamente) hasta que los músculos se fortalezcan.
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